No es extraño escuchar o leer en las redes sociales a gente afirmando que si tienes una devoción con una deidad concreta y necesitas trabajar con otra, ésta podría ponerse celosa y castigar a su devoto si así lo considerase oportuno. Y, aunque haya mucha gente que se tome esto completamente en serio y honre a más de una deidad con el temor a ser fulminada por una venganza divina, tenemos que tener claro que no hay nada más lejos de la realidad.
Durante cierto tiempo he pertenecido a la Tradición Correlliana y me gusta la visión que tienen a este respecto, ya que consideran que todas las deidades son aspectos de una Divinidad Universal que lo engloba todo, de modo y nunca podrán estar en conflicto entre sí. Para ello se basan en la analogía de un diamante tallado: Si todas las caras son perfectas en sí mismas y pertenecen al mismo diamante, ¿por qué habría de haber conflictos entre unas y otras? ¿Por qué deberían de tener entonces celos entre ellas, si todas ellas no son más que aspectos de una gran Divinidad Universal?
Planteándonos el tema desde un enfoque diferente al correlliano, ¿por qué iban a estar dos deidades controlando qué hacen sus devotos y contando su número de seguidores, como si fuera una competición divina en la que gana la deidad a la que más gente le reza y le hace ofrendas? Creo que humanizar lo divino y equiparar a los dioses con los humanos constituye una importante limitación de todo cuanto son. Nosotros estamos en un plano y ellos en otro… ¿de verdad podemos atribuirles emociones como los celos e ideas como la sed de venganza hacia sus devotos?
Pienso que afirmar que una deidad pueda resentirse si decides trabajar con otra es una forma de manipulación en un camino espiritual que proclama la libertad de culto y creo que las personas que dicen esto sólo buscan aumentar la popularidad de la deidad con la que trabajan imponiendo un culto exclusivo a la misma al implantar en los demás el miedo a posibles castigos divinos.
Admitámoslo, todos sabemos que hay personas en la comunidad pagana que buscan ser un referente por trabajar con cierta deidad, y una estupenda forma de extender el culto a la misma (y también de ganar adeptos que admiren a esta persona por ser un referente en tal deidad) es sembrar el miedo al trabajo con otras entidades. Controladas por este sentimiento, muchas personas no se atreven a investigar por sí mismas otras opciones, a experimentar transitando su propio camino y a conocer a otros dioses y diosas maravillosas que están esperando el momento de cruzarse en sus vidas para colmarles de bendiciones. ¡Precisamente se pierden uno de los principales pilares de este camino espiritual!
Así que, si en el futuro te encuentras con una persona que te alabe por trabajar con la misma deidad que ella y magnifique sus virtudes, pero te desaconseje establecer trato con otras deidades por temor a posibles represalias, te invito a recordar la analogía del diamante o incluso a pensar en la siguiente reflexión que una buena amiga compartió hace años conmigo: ¿Por qué la rama de un árbol debería competir con otra rama por el agua y los nutrientes, si ambas surgen de un mismo tronco y están igualmente conectadas a él? ¿Acaso no están conectadas entre sí y pertenecen a un mismo árbol? Pues con la enorme cantidad de deidades existentes ocurre lo mismo: todos pueden ser considerados como diferentes aspectos de la Divinidad Universal… o también podemos pensar que tienen cosas más interesantes que hacer que estar pendientes del ranking de seguidores. ¡Es imposible que se enfaden unos con otros!
No dejes que nadie te juzgue por tus creencias. No eres mejor persona por trabajar con la diosa que esté de moda en este momento, ni estarás mejor valorado por tener al tal dios como patrón. Tan solo eres un ser humano capaz de hacer algo maravilloso: conectar por ti mismo con el Universo y todas las entidades que en él habitan. No te dejes arrastrar por la corriente: hay muchos ríos, mares y océanos en este camino espiritual, algunos más poblados que otros, pero solo tú debes decidir en qué aguas nadar.
Nuhmen Delos ~