Mabon se celebra durante el equinoccio de otoño, cuando el día y la noche tienen de nuevo la misma duración. Coincidiendo con la segunda cosecha, durante esta temporada se aprecia el declive de la vida en la naturaleza: algunas plantas nos brindan sus últimos frutos, mientras que otras se desprenden de sus hojas, creando un manto protector sobre la superficie de la tierra. Por su parte, los animales comienzan a refugiarse en sus guaridas y a prepararse para el invierno. Es tiempo de mirar hacia dentro, de valorar todo lo que se ha conseguido y de analizar qué es lo que realmente necesitamos para los próximos meses. Solo así podremos ejercer el desapego y dejar ir todo aquello que ya no es necesario, al igual que hacen los árboles con sus hojas.
Actividades para realizar en Mabon
Pasear por la naturaleza. El otoño es una estación que transforma por completo el paisaje. Sal al campo, al parque o a un bosque y contempla las hojas de los árboles teñidas en tonos cálidos, escucha a los pájaros graznando y revoloteando entre las ramas, siente la suave brisa otoñal acariciando tu piel y honra el cambio de temporada recolectando flores y frutos de la estación.
Realizar una limpieza otoñal. Es muy habitual realizar una limpieza profunda de nuestro hogar con la llegada de la primavera, pero el otoño es una muy buena época para purificar tu hogar de cara a la parte oscura del año. Limpia físicamente todas las habitaciones, deshazte de todo cuanto no sea necesario, purifica con un sahumerio todos los rincones y finalmente bendice tu hogar.
Experimentar con manzanas. Pese a que está disponible durante todo el año, la manzana es uno de los frutos carnosos más destacados del otoño. Ve a una huerta a recolectar manzanas, hornea un delicioso pastel de manzana para los tuyos, organiza un juego de caza de las manzanas o utilízalas en tu ritual de Mabon para agradecer a la Tierra por los frutos que nos da.
Celebrar la abundancia. Si bien esto es algo que habitualmente se encuentra vinculado a la festividad de Lammas, una buena forma de honrar todo cuanto tenemos es a través de la comida. Organiza una cena a la luz de las velas en la que todos los asistentes lleven algo para compartir preparado por ellos mismos.
Conjurar el equilibrio. El equinoccio de otoño es un maravilloso momento para hacer balance personal. ¿Qué aspectos de tu vida van bien? ¿Cuáles necesitan una mejora? ¿Has logrado todo lo que te propusiste a principios de año? ¿Tienes que cambiar algún hábito personal? Anota en tu lista tus reflexiones… ¡e incluso podrías crear un ritual para potenciar el equilibrio en tu vida!
Aquí puedes encontrar muchas más actividades para realizar en Mabon.
La naturaleza durante la época de Mabon
Resulta difícil comprender en profundidad las celebraciones asociadas a cada Sabbat si no se analizan los cambios que suceden en la naturaleza. Mabon es una fecha regida por el equilibrio entre la luz y la oscuridad antes de los meses de invierno ya que, a partir de ese momento, los días serán más cortos y las noches más largas. En esta época regida por los vientos matutinos y la bajada nocturna de las temperaturas. Las hojas de muchas plantas se tiñen de tonos rojos, amarillos y marrones, mientras que los animales se preparan para los tiempos difíciles.
Los cambios de la naturaleza durante el otoño también nos afectan a los seres humanos. La creciente duración de las noches, unida al descenso de las temperaturas nos invitan sutilmente a permanecer en el hogar y prepararnos para los próximos meses, aunque todavía aprovechemos las horas centrales del día para disfrutar de los espacios exteriores. Las energías de Mabon son especialmente buenas para sanar y nutrirnos con las energías de la Tierra, para deshacernos de todo aquello que llevamos mucho tiempo sosteniendo, así como para descubrir en nuestro interior todo aquello que habitualmente buscamos fuera.
El Dios y la Diosa en Mabon
En la alegoría del Dios y la Diosa a lo largo de la Rueda del Año, en Mabon el Dios continúa su declive vital a medida que pasan los días hasta que apenas le queden fuerzas. Poco a poco, se prepara para su viaje al otro lado del velo que tendrá lugar en unas semanas con la llegada de Samhain. Mientras tanto, la Diosa permanece junto al Dios en estos momentos de dificultad y se encarga de nutrir y cuidar al resto de las criaturas que habitan la Tierra, preparándola para la inminente llegada de la etapa oscura del año.
A ti, que visitas Zona Arcana en busca de información sobre este Sabbat, te deseo un muy feliz Mabon. Que la Madre Tierra genere estabilidad en tu vida y que todo cambio que en ella se produzca sea para mejor. Si quieres leer el resto de entradas sobre Mabon, haz click aquí.
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