Ritual de Beltane: La llama del amor propio
Ritual de Beltane: La llama del amor propio

Ritual de Beltane: La llama del amor propio

Este mini ritual de Beltane forma parte de una serie de entradas de Zona Arcana en las que se plantean pequeños rituales para cada una de las festividades de la Rueda del año utilizando una vela como elemento básico. Tanto si no te es posible celebrar Beltane de forma habitual por falta de tiempo, como si estás buscando algún acto de poder para incorporarlo a un ritual más largo, este mini ritual de Beltane es para ti.

Si estás buscando más ideas para tu celebración, en esta entrada tienes 50 actividades para realizar en Beltane.

Objetivo del ritual

Conectar con tu amor propio.

Preparación y materiales necesarios

Para llevar a cabo este ritual es recomendable que erijas un altar de Beltane, ya que así podrás conectar íntimamente con las energías de este momento de la Rueda del año. Además de los objetos y herramientas que utilices habitualmente en tus ceremonias, necesitarás lo siguiente:

  • Encendedor o cerillas
  • Una vela roja
  • Un espejo
  • Aceite esencial a tu elección
  • Una cinta roja
  • Una flor olorosa

Ritual de Beltane

Ritual de Beltane: la llama del amor propio

Una vez que tengas todo preparado, sitúate frente a tu altar y dedica unos minutos a despejar tu mente de los pensamientos cotidianos. Centra tu intención y tus energías en el ritual que estás a punto de comenzar. Enciende las velas del altar, salvo la roja, y permanece un instante contemplando la atmósfera mágica que has creado.

Si así lo deseas, puedes trazar el círculo mágico para contener y trabajar cómodamente las energías que se van a mover durante el ritual. También puedes realizar invocaciones que consideres necesarias: hay quien invoca a los Guardianes de los Elementos, al Dios y la Diosa, a sus guías o incluso a las divinidades que tenga asociadas a cada punto de la Rueda del año. Elegir a quién invocas y en qué orden es una decisión completamente personal.

A continuación, adopta una postura cómoda y toma la vela grande entre tus manos. Cierra los ojos y piensa durante unos instantes:

¿Qué es para ti el amor propio?

¿Cuáles son tus formas de dar y recibir amor?

¿Qué significa realmente para ti amar a alguien?

¿Estás esperando que otros te den el amor que aún no te das?

¿Cómo cambiaría tu vida si te trataras con el mismo amor que ofreces a los demás?

¿Cómo puedes trabajar tu amor propio?

Deja que las respuestas fluyan por tu mente con suavidad, sin juzgarlas. Cuando sientas que es el momento, abre los ojos y unge la vela roja con el aceite esencial que hayas elegido. Mientras lo haces, impregna la vela con intención: imagina que estás despertando tu capacidad de amarte, de verte con los ojos del amor y de quererte como la persona más importante de tu vida.

Con la vela ya ungida, toma la cinta roja y envuélvela suavemente en tu muñeca o colócala cerca del corazón, como símbolo del compromiso contigo mismo/a. Este lazo representa tu unión con el amor propio, un vínculo sagrado que renuevas en este momento. Después, toma la flor olorosa, acércala a tu rostro y respira su fragancia con conciencia plena. Permite que su aroma te recuerde todo el amor que hay en ti.

Ahora, colócate frente al espejo. Mírate a los ojos, sin prisas. Reconócete. Acepta lo que ves con todo el amor posible. En ese reflejo está tu historia, tu luz y tu sombra. Enciende entonces la vela roja y contempla su llama reflejada junto a la tuya. Observa cómo brilla el fuego y cómo su calor despierta tu energía interior amorosa, pues esta es la llama del amor propio. Di en voz alta o en tu mente: Hoy enciendo esta llama para recordar que el amor empieza en mí. Lo siento. Lo deseo. Lo atraigo a mí. Lo manifiesto. Lo acepto. Lo recibo y doy gracias por ello.

Permanece en silencio unos minutos, respirando hondo y dejando que esta experiencia se asiente en tu cuerpo y en tu corazón mientras te sigues contemplando en el espejo. Deja que la vela roja se consuma completamente en un lugar seguro, como símbolo de tu compromiso renovado con tu amor propio. Guarda la cinta y la flor como recordatorio de este momento. Puedes llevar la cinta contigo o colocarla en tu altar.

Para terminar,  despide a las entidades que hayas invocado al comenzar y abre el círculo, si lo has trazado, para permitir que las energías contenidas durante el ritual fluyan y se dispersen. Come algo dulce para volver a conectarte con la tierra y después apaga todas las velas que hayas encendido, excepto la que contiene la llama del amor propio, que ha de quedar encendida hasta que se consuma.

¡Feliz Beltane!

Nuhmen Delos ~

¿Quieres saber más sobre Beltane? Aquí tienes todas las entradas de Zona Arcana sobre esta festividad.


Foto de Nuhmen Delos para Zona Arcana.

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